En la primera mitad del viernes, el mandatario concurrió hasta la planta de Grabya S.R.L. para reunirse con Adolfo Giannitti, Miguel Giannitti y Romanella Giannitti, propietarios de la firma cañuelense.
Durante aproximadamente dos horas Arrieta y los empresarios caminaron por el predio ubicado a la altura del Km. 69.500 de la Ruta Nº205 y que se dedica a la elaboración de subproductos ganaderos como aceites y grasas, harina de carne, fertilizantes orgánicos y harina y cenizas de huesos.
A pesar de la crisis económica y la caída del consumo, con un esfuerzo mayúsculo, la empresa ha podido mantener los 150 puestos de trabajo, que está representado en un 98% por trabajadores de Cañuelas. Asimismo, la familia Giannitti ha conservado la intención y la capacidad de inversión con la puesta en marcha de una nueva planta de tratamiento de grasa animal y apostando por la construcción de un segundo proyecto productivo de aceites vegetales.
Posteriormente dialogaron con un semblante de preocupación sobre la recesión económica actual del país, el aumento de las tarifas y la imposibilidad de acceso a los créditos empresariales. Después caminaron por el parque de tratamiento de líquidos que significó para la industria una secuencia de reconocimientos de parte de ACUMAR y organismos nacionales e internacionales, por su compromiso con las exigencias ambientales.
El intendente se comprometió a regresar prontamente y felicitó a la familia Giannitti “por la inversión sostenida durante 50 años. Desde el Gobierno municipal estamos a entera disposición de la empresa, con la intención de poder brindar nuestras herramientas para resolver potenciales dificultades que puedan presentarse en este marco general adverso”.